A diferencia de los espacios sin vegetación, donde la vida silvestre es escasa, los jardines son refugios naturales donde cada ser cumple un papel fundamental. En estos espacios, las plantas florecen, los insectos revolotean y las aves encuentran alimento, formando una red de interacciones muy importantes para el equilibrio del medio ambiente
Gracias a los polinizadores, como las abejas y mariposas, las flores pueden transformarse en frutos y semillas, asegurando la reproducción de muchas especies vegetales. Mientras tanto, las aves encuentran en estos espacios una fuente de alimento y refugio.
Al cuidar estos espacios, protegemos a los polinizadores y a las aves, ayudando a mantener el delicado equilibrio de la naturaleza.
¡Descubre cómo este increíble ecosistema funciona en armonía y cómo cada pequeño gesto puede marcar la diferencia para la vida que habita en él!
Objetivo: Aprender cómo y por qué las plantas, insectos y aves interactúan en un jardín.